¿Quién inventó al pato Donald?

Hace unos meses me preguntaba yo por qué desde hace mucho tiempo ya no había cuentos del Pato Donald en los puestos de periódicos. Los hados de los deseos me han de haber escuchado, porque en este momento tengo en mis manos el número 1 de la revista Mickey, editado por Editorial Televisa, y que viene a llenar un nicho que desde tiempos del truene de la legendaria y para mí muy querida Editorial Novaro, había quedado desocupado. Este número es casi como los que yo leía en los viejos tiempos. La única diferencia que noté a primera leída es que Mickey y Tribilín hablan coloquialmente, cosa que no se permitían hace veinte años. Pero bueno, las cosas cambian. Otra, que tuve que releer para notar, es que Tribi no es Tribi, sino Goofy. Pero qué le vamos a hacer.

 

Pero ese no es el centro de lo que quería decir hoy, sino aprovechar el pretexto para hablar de Carl Barks, un hombre que nació en 1901 y que fue dando botes de oficio en oficio hasta que en 1928 descubre que puede vender sus dibujos y se vuelve ilustrador. En 1935 empieza a trabajar para Disney, primero como animador, y luego elabora el proyecto de un cómic (o cuento, como les llamábamos en México en los años en que yo era sabio). En 1942 empezó la era de los comis de Barks (disney publicaba comics desde antes), que desde mi punto de vista, reinventaron totalmente los personajes de Disney. Si te fijas muy bien, un cuento del pato Donald, de sus sobrinos y el Tío Rico (Tío Gilito, le llaman en españa), los chicos malos (los apandadores, dicen en España) es totalmente diferente a una película de Disney con el mismo pato Donald. Son en realidad dos Donaldos, y la verdad, yo me quedo con el de Barks (algunos animadores también lo piensan así, y sacaron las patoaventuras en serie de TV, más cercanas a los personajes Barks que a los Disney, pero… ¡con la omisión de Donald! creo que precisamente por la dificultad para hacer compatible el Donald Disney y el Donald Barks)

Barks hizo comics hasta 1965, sin crédito personal por ello, a pesar de que inventó al Tío Rico (o Gilito, en 1947), Pánfilo Ganso (Narciso Bello en España), los pequeños castores (los cortapalos, en España)…


Mucha gente piensa que a Pinocho lo inventó Disney, y se olvida de Carlo Collodi. Pienso que olvidar a Barks es una injusticia semejante. Para otra vez, hay que fijarse.

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