Dos horizontes

 
Hay madrugadas, como hoy, en que mi mente de viejito me habla desde el futuro. Me pide que la cuide ahora, para que suframos menos cuando llegue el tiempo. Pero no sólo me pide que la alimente correctamente. También me dice que debo llenarla de recuerdos de momentos dichosos para paladearlos cuando llegue el tiempo. Que debo tratar a los demás correctamente, para tener menos cosas qué lamentar cuando llegue el tiempo. Que debo tratar de tener mis asuntos en orden para no angustiarme cuando llegue el tiempo pensando que dejé cabos cruciales sueltos. Yo procuro hacerle caso, porque ya ahora me salva a veces, y a veces me condena, el trato que hice hace algunos años, con mi mente del pasado.
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6 respuestas a Dos horizontes

  1. . dijo:

     
    Toda una filosofía eso de cuidar la mente, llenarla de recuerdos buenos, tener los asuntos en orden…
     
    Yo creo que es más bien una manera de hacer el presente y vivirlo…
    (Y no temas por tu mente de viejito: es sabia)
     
    Un cálido abrazo.
     
     

  2. Carlos Mario dijo:

    Doc:Sus palabras son recibidas como una cobija caliente en una tarde fría y lluviosa para mi persona.Cuanta sabiduría tienen sus palabras.Gracias por compartir.Un abrazo enorme.

  3. Sabine dijo:

    La naturaleza del ser humano no falla en prepararnos en cara a los asuntos de la vida. Solamente hay que escuchar de vez en cuanto a su voz interior. Hay una cierta edad en la que cambia la perspectiva en el sentido que hasta este punto se vivia la vida a la mejor como si la muerte no existiera, todo p’alante, y de repente nos damos cuenta que nos estamos acercando al punto final. Y todo lo que pensabamos que ya viviamos desde el punto de vista existencial se transforma en sensaciones y pensamientos todavía más intensos en cara a la muerte.  A la mejor llegas a pensar:¿Qué quiero realmente hacer con el resto de mi vida, qué son las cosas realmente importantes, qué son las experiencias más válidas para entender un poco más del conjunto que se llama "vida"?  Lo fascinante de esta edad en que uno está en la mitad de la vida, consiste en que todavía entiendes a las personas jóvenes , pero por el otro lado  ya empiezas a entender más el mundo de los mayores de edad.
    Un saludo desde Menorca

  4. La Piedra dijo:

    ¡Qué precioso texto, mi doc! Sus mejores escritos nacen de madrugada, tiene usted pacto con la noche, como lo tienen los grandes.
    Siempre me deja fascinada su manejo fluido de los tiempos. Esa capacidad suyapara verse desde el futuro y la facilidad con que ve el presente como tiempo pasado.
    Añoro el tiempo en que podía verme desde el futuro, doc. Ahora sólo pido llegar a él en libertad y apegada a mis principios, sana, si no es mucho pedir y con algo para darle a mi beba. Sería lindo disfrutar de mi mente de viejita que desde siempre me había hablado y dado recomendaciones. No obstante, en un país como este, en una situación como la que estamos viviendo, ya estoy en el futuro y condenada por los pactos que hice con mi mente del pasado. Es como haber guardado durante años las llaves de unas puertas que hoy por hoy desaparecieron- fueron cambiadas por otras-. Ya las llaves no abren nada.
     
    Reciba un abrazo y muchos saludos;
     
    La Piedra

  5. Alejandra dijo:

    Hoy sí te pasaste… te quiero.
    Ale

  6. Nuada dijo:

    Vine a tu casa a releer esta entrada porque es muy bonita. La recordé esta mañana mientras ponía en orden mis cosas y me prometí venir a leerla de nuevo apenas tuviera un rato libre, porque aunque la he salvado ya en el HD, por supuesto, en mi HD no hay café y en tu casa sí. Y esta mañana, como muchas otras, mientras ponía mis cosas en su lugar, pensaba en mis pequeños desórdenes, en mis pequeños regueros, en qué pasaría si en unos minutos el tiempo por llegar llegara de sorpresa: ¿qué quedaría mal puesto? ¿Qué tanto dejaría suelto? ¿Qué deberes por cumplir? ¿Qué trabajos por hacer? ¿Qué ventanas por limpiar? (jajaja) ¿Qué tanto estorbo harían mis tres o cuatro pertenecias en estos 158 metros cuadrados? ¿Qué tanto tardarían en tirar todo a la basura? ¿Qué disgustos me quedarían por arreglar? ¿Qué, de lo poco que tengo para dar, se quedaría guardado? ¿A quién le haría falta lo que no di, o lo que no dije, o el silencio que rompí hablando pendejadas? Seguramente habrá quejas, ja,ja, esas nunca faltan, mi doc. Pero el balance fue bueno. Llegué a la conclusión de que mi mente de viejita me ha funcionado bastante bien desde 2006 y le dejaré poco trabajo a los que queden, y con mi mente del pasado, con esa rompí el contrato, ya es bastante cargar con la condena, ja, ja.Saludos.

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